Casi 1 año ha pasado desde la publicación del número anterior. Porque el tiempo pasa para todas las personas que siguen bregando. Y es ahí donde, batalla a batalla, se ganan las guerras. Da igual el tiempo de conquista: nada ni nadie quitará el sabor de la victoria.
Y es esa victoria la que se celebra con este editorial. Por fin quienes están en las páginas siguientes y quien suscribe este texto han podido juntar sus espacios temporales para dar salida a este número que espero disfrutes durante el periodo vacacional.
Como cada número se asoman a estas páginas, en pixel o en tinta, creativos que desarrollan su trabajo con ADN canario. Empezamos por Irene León (Maruchita) cuyos trazos son pura vida y mensaje enriquecido en grafito y acuarela.
Dailos Pérez da continuidad al fanzine con su contundente trabajo en el diseño gráfico, desde tierras valencianas.
Alicia Jorge Toledo inunda con su inigualable energía positiva el diseño interior de los rincones de muchos espacios en las islas, y ahora también en esta publicación.
Del mismo modo, Rafael Moreno Tapia desenfunda su impronta artística con el jeito que solo unos pocos poseen y logran transmitir tanto a su trabajo como a quienes acuden a él para adentrarse en el mundo del arte.
Abraham de Funes nos traslada a la artesanía desde los Estados Unidos, donde lidera un proyecto de recuperación de la creatividad hecha a mano en el que la artesanía canaria gana enteros bajo el paraguas de su marca: ABRAGO.
No falta a la cita el siempre formativo y clarificador artículo de
Carlos Hernández de
Quaderno, esta vez acerca de cómo facturar legalmente la actividad profesional de un blog.
Y cerramos número con Héctor Molina; un joven entusiasta que busca su futuro profesional desde el tesón por renacer a través del trazo que ilustra la portada de este número.
Pero este número no tendría sentido estos días si no estuviera dedicado a dos personas: Andrés Nieves por su eterna valentía y capacidad para demostrarnos que “Orejón” no hay más que uno. Como diría José Luis López Vázquez en su papel de Fernando Galindo en ‘Atraco a las tres’, aquí sabes que tiene Vd a un admirador, un amigo, un esclavo, un siervo.
Y a Chris Tadeo a quien el destino se ha llevado para que nos vigile desde un espacio que no entendemos pero que aglutina un talento apabullante desde su llegada.
Al resto, solo puedo desearles lo que a mí mismo: que la creatividad nos acompañe hasta nuevo aviso.
Sergio Sánchez
Avatareño Mayor